Ya se acerca la noche más escalofriante, terrorífica y divertida de todo el año… y es que, en nada, nuestros peques podrán celebrar Halloween y disfrutar de una noche tan especial ¡y nosotros con ellos!
En esta ocasión, desde SuperMoments, queremos sorprenderos con un post diferente, en el que las recetas de Halloween sean las auténticas protagonistas y os permita pasar en familia una tarde de lo más emocionante.
Así que, sigue leyendo ¡toma nota! y prepárate para que tus hijos cocinen los platos más sorprendentes del año.
Momias al gusto
¡Sí! ¡Como lo estás leyendo! La noche de Halloween necesita contar con una momia para que ésta resulte mucho más auténtica, así que, de forma rápida, fácil y divertida, prepara con tus hijos esta receta tan ¡espeluznante!
Para ello solo necesitarás:
- Tallarines
- Aceite de oliva virgen
- Sofrito de tomate
- Cebolla
- Carne picada
- Aceitunas negras
El primer paso será pochar la cebolla cortada a trozos muy pequeños, cocinarla junto a la carne picada y, cuando ésta esté lista, añadir el sofrito de tomate.
Mientras tanto, pondremos a hervir los tallarines en abundante agua, con una pizca de sal y un chorrito de aceite y, cuando estén listos, los escurrimos y pasamos por agua fría para que no se peguen entre sí.
Con la carne preparada, crearemos rollitos alargados cubriéndose con los tallarines y, por último, pondremos alcaparras para darle forma a los ojos, si no disponemos también podemos cortar dos aritos de aceitunas y tendremos una deliciosa momia.
Y ¡ya está! Antes de servir, métela unos minutos en el horno y, si os apetece, espolvorear con queso rallado. ¡Se chuparán los dedos mientras la preparan!
Un monstruo ¡de lo más movedizo!
¿Qué sería de la noche Halloween si sus terroríficos monstruos? Pues aquí tienes esta receta ¡para que no falte de nada! En realidad, es super fácil de realizar porque la base consiste en gelatina de toda la vida. ¡Podemos utilizar los colores que queramos!
Pero, para crear nuestros los más simpáticos monstruos, rellenaremos vasitos con la gelatina realizada e introduciremos en la nevera. Una vez ya se hayan enfriado, les agregaremos gusanos de golosina a modo de tentáculos. Para los ojos podemos utilizar goma eva, ojos adhesivos y pegarlos en el recipiente o bolitas de chocolate gigantes que salgan por encima. !¡Menudo susto tan delicioso!
Otra idea es cambiar la base por flan y podemos añadirle brazos deformes, utilizando palitos de queso o chocolate. ¿Te atreves a innovar?
Un fantasma, ¡de lo más dulce!
Y, como no podía ser de otra manera, los fantasmas deben estar presentes en todas las recetas de Halloween para niños. Por ello, te explicamos la siguiente, para que pases una divertida tarde cocinando con tus niños. Los pasos son muy sencillos, ya que se trata de preparar merengues de diferentes formas y tamaños.
Para hacerlos necesitarás;
- 2 claras de huevo
- 200 gramos de azúcar
- 50 gramos de chocolate negro.
Añade el azúcar a las claras y bátelo bien hasta que consigas integrarlo todo por completo y quede a punto de nieve.
Utiliza una bandeja de horno forrada con papel apto para él y, con la ayuda de una cuchara, haz pequeños montoncitos que acaben en punta. Introdúcelos en el horno a una temperatura de entre 100 y 120º y déjalos cocer durante, aproximadamente, una hora.
Cuando ya estén listos, déjalos enfriar y entonces es el momento de derretir el chocolate y, con la ayuda de un pequeño pincel, dibujarles a nuestros fantasmitas ojos y una graciosa boquita.
¡Ponte manos a la obra y prueba con estas deliciosas recetas! Disfruta el tiempo que pases con tus hijos y crea en su mente recuerdos contigo que jamás olvidarán. ¡Feliz noche de Halloween!