La vuelta al cole requiere de energías renovadas, tanto por parte de los niños como de los padres. Tienes una buena oportunidad para apostar por almuerzos sanos desde el primer día del nuevo curso. El almuerzo es más importante de lo que puedas pensar, ya que les ayudará a aguantar hasta la hora de comer. ¡No olvides llenar su mochila de energía!

 

Frutas de temporada

Las frutas son un grupo de alimentos totalmente sano y muy variado. Solo con ellas puedes preparar mil y un almuerzos a lo largo del curso. Eso sí, procura utilizar las que más le gusten a tus hijos. No hay razón para obligarles, conseguirás peores resultados y acabarán por odiarlas. Además, el colorido de algunas de las piezas les llamará la atención.

A la hora de elaborar un almuerzo, puedes empezar por una brocheta de frutas. Es una elaboración versátil en la que combinar diferentes piezas. Un trozo de manzana, fresa, uva o melón le va a encantar. Además, cada temporada podrás utilizar las variantes del momento. También puedes optar por una macedonia, puré o un zumo natural para que mantenga una buena hidratación.

brochetas

Lácteos para un almuerzo nutritivo y rápido

Los lácteos no faltan a esta cita. Es otro grupo de alimentos importante y muy variado, así que podrás ir cambiando a lo largo de los días. Incluso podrías combinarlos con otros grupos. Por ejemplo, un yogur natural encaja sin problemas con frutas de pequeño tamaño, como los arándanos. El queso siempre es una opción recomendable, en especial los que no contienen mucha sal.

Un batido puede ser una opción, pero vigila que no contenga una cantidad alta de azúcar. Revisa con detenimiento las etiquetas de los alimentos, ya que contienen información importante que te permitirá mejorar tus hábitos alimenticios y los de tus hijos. Si tienes tiempo, no dudes en elaborar batidos caseros con leche y fruta de temporada y guardarlos en la nevera fresquitos. Echa mano de termos y botellines de aluminio adaptados para mantener su temperatura óptima y puedan así disfrutarlos en el cole.

 

Bocadillos de panes integrales

El bocadillo tradicional sigue teniendo cabida a la hora de llevar una alimentación sana. Opta por los panes integrales, ya que contienen más fibra que los blancos. Este elemento es beneficioso para el organismo por diversas razones, como ayudar a regular el tránsito intestinal y controlar los niveles de insulina en sangre. De esta forma, no solo reducirás el riesgo de padecer diabetes, también permitirás que el organismo de tus hijos gestione mejor los hidratos de carbono y engorden menos.

Los bocadillos y sándwiches son muy versátiles. Una idea que puedes poner en práctica consiste en un bocadillo de pechuga de pavo, con láminas de manzana y queso fresco. Combinas proteína animal, una buena dosis de calcio y la fibra de la fruta. Otra alternativa consiste en guacamole en láminas y unas rodajas de tomate. La sandwichera de tus peques será la envidia del patio.

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Frutos secos

Los frutos secos no pueden faltar, pero ten cuidado con la cantidad. Este grupo de alimentos contiene una alta cantidad de proteínas en unos pocos gramos. Por ejemplo, 100 gramos de avellanas aportan unas 628 calorías, por lo que hay que cuidar las proporciones. Una mezcla de variedades es una elección más que indicada, aunque debes vigilar que no contengan sal.

Comerlos en forma de crema es una alternativa, sobre todo las bajas en azúcares. Preparar un bocadillo de crema de cacahuetes es muy sencillo y tu hijo disfrutará de un almuerzo rápido, sabroso y le dará toda la energía que necesita hasta la hora de comer. También obtendrá nutrientes importantes como el hierro o diversas vitaminas.

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Anímate con la repostería casera

Si eres un amante de la cocina, tienes todo el control sobre lo que comen tus hijos. Elaborar unas galletas bajas en calorías o barritas de frutos secos es muy sencillo. No olvides dejarles participar en la cocina, así irán aprendiendo a desenvolverse en este entorno. Además, podrán contarles a sus compañeros que han hecho ellos mismos el almuerzo, el cual estará más sabroso que el que tienen ellos.

 

En definitiva, los almuerzos sanos son posibles, ya que tienes a tu alcance una amplia variedad de alimentos de todo tipo. Solo hay que poner un poco de creatividad y modificar algunos malos hábitos. Elaborar un buen almuerzo para niños no te llevará demasiado esfuerzo y les enseñarás la mejor cara de la comida. ¡Y la vuelta al cole será súper!